Información publicada por Mujeres Cofrades de Zamora, el Sábado, 6 de febrero de 2010
La semana pasada la directiva de Jesús Nazareno, en presencia de tres representantes del Obispado de Zamora, presentó a las responsables de la Sección de Damas de la Virgen de la Soledad el borrador de sus nuevos estatutos.
Las Damas se mostraron muy sorprendidas por el contenido del borrador, ya que, previamente, se había aprobado en una asamblea extraordinaria que las integrantes de la Sección tenían la intención de convertirse en Cofradía, manteniendo ciertos lazos con la Cofradía matriz.
Sin embargo, la directiva de Jesús Nazareno nunca ha estado por la labor de "soltar" la Sección, de darle una independencia total a las damas y argumentan que «la Virgen es nuestra». Argumentan a su favor que aquella asamblea extraordinaria se celebró sin su consentimiento y que por tanto no tiene validez legal.
Lo cierto es que el borrador con los nuevos estatutos, en los que desaparece la Sección y, por tanto, su junta directiva, está expuesto en la página web de la primera y contiene algunos puntos que no quedan demasiado claros.
Por ejemplo:
Hábito femenino. En el capítulo II_de los nuevos estatutos, en la división de categoría de cofrades, se explica que las mujeres siguen siendo Damas de la Virgen de la Soledad, que sólo podrán desfilar la tarde del Sábado Santo y se especifica que deberán ir «vestidas de luto riguroso, de la forma que se acuerde, y la medalla o distintivo oficial con la efigie de la Virgen, pendiente de cinta o cordón, colgada del cuello, y luz y vela de color, con tulipa de material y formas que designe la Junta Directiva». En ningún momento se hace referencia a la Capa aprobada por la mayoría de las Damas o al cambio de la cinta por el cordón. Ni siquiera a la nueva iluminación con cera líquida aprobada en la asamblea general de la Sección el año pasado. Es decir, lo decidido hasta ahora por las damas no importa. A partir de los nuevos estatutos todo lo decidirá la Junta Directiva, que elegirá el presidente y que podrá incluir, a su criterio, a mujeres. o Hermanas de paso.
En ningún punto del nuevo estatuto se contempla que las mujeres puedan tener derecho a cargar con los grupos escultóricos de la Cofradía en ninguno de los dos desfiles. Ni siquiera si alguna mujer se presenta a aspirante de hermana de paso y cumple con los requisitos de «talla, edad y fortaleza física necesaria, a juicio del Encargado Exterior del Paso».
Mujeres Merlú. Tampoco podrán las mujeres optar a ser Merlú de la Cofradía. Es una figura que se reserva sólo a los hermanos varones.
Dos desfiles. En el artículo quinto del Capítulo II, se hace referencia a los derechos y obligaciones de los integrantes de la Cofradía y se especifica que «hombres y mujeres tienen los mismos derechos y obligaciones, salvo en lo que se refiere a los desfiles procesionales que, por razones históricas, tradicionales y de espacio, se limitarán a que los hombres procesionen en la Madrugada del Viernes Santo y las Mujeres en la tarde-noche del Sábado Santo.
Abad o Abadesa. En los cargos de la Junta Directiva, recogidos en el artículo 10, dentro del Capítulo III dedicado a los Organos de Gobierno, se contempla que el cargo de Abad puede ser ocupado por un hermano o por una hermana. Sin embargo, si esta figura fuera la «responsable de la organización y gobierno de las procesiones», difícilmente podría ser ejercida por una mujer, ya que a las damas se les niega el derecho a procesionar el Viernes Santo
Vicepresidente segundo, a medida. El vicepresidente segundo será, según los nuevos estatutos, «el/la responsable en todo lo referente a la organización del desfile procesional del Sábado Santo». No queda claro aquí si el abad o la abadesa serán responsables también de la misma función. También se ocupará el vicepresidente segundo del Quinario en Honor de la Virgen de la Soledad. Dos funciones que hasta ahora desempeñaba la directiva de la Sección, lo que convierte el cargo de vicepresidente segundo en un cargo a medida de una mujer.
Disposición transitoria sin fecha de caducidad. Al final del texto de los estatutos se incluye una disposición transitoria que, curiosamente, no tiene fecha para finalizar. En ella se explica erróneamente que la Cofradía tendría en la actualidad 5.500 hermanos (sólo son 5.000) y 3.500 hermanas (sólo son 3.000). Por este motivo y «a los efectos de administración y control, y por la complejidad actual de los componentes de la Cofradía, los listados de hombres y mujeres se mantendrán por separado». Pero esta disposición, por la naturaleza de transitoria, debería desaparecer algún día y la cofradía tendría un solo listado de 8.000 personas. Si el Obispado autorizara -ya lo ha hecho en una ocasión con una dama- la presencia de las mujeres el Viernes Santo, la procesión que saldría a la calle podría estar formada por casi 8.000 personas lo que conllevaría dificultades en la organización de una procesión que ya de por sí resulta problemática. Tampoco está claro que no se repita este hecho en el caso en que los hombres solicitaran desfilar el Sábado Santo. Ya hay quien apunta a medidas especiales llegado el caso, por ejemplo, que un año salgan los números pares y al siguiente los impares.
Las mujeres no pueden ser de la Banda. La Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía, que participa tanto el Viernes como el Sábado Santo, es otro terreno vedado a la mujer. En todos los textos que hacen referencia a la misma en la nueva normativa sólo se habla en masculino. Sin embargo, las mujeres llevan ya varios años participando en las bandas de música de otras cofradías mixtas de la capital. El hecho de ser jefa de la Banda, tampoco se contempla.
Si los hermanos aprueban los estatutos, estos serán remitidos al Obispado que es el que tiene la última palabra.
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