Por María Victoria Botí Espinosa. Presidenta de la Federación Nacional Asociaciones Mujeres Cofrades
Un criterio único sería el que debería establecer nuestra iglesia en todas sus diócesis a la hora de afrontar de una vez por todas la discriminación que aún sufren las mujeres en algunas de las hermandades y cofradías de nuestro país.
Mientras que en la Archidiócesis de Sevilla después de pasar catorce años desde que se establecieran las Nuevas Normas Diocesanas, que daban igualdad de derechos en voz y voto a los hombres y mujeres en las hermandades de Sevilla, un decreto por fin destierra el veto a la participación de nazarenas en las procesiones, en la diócesis de Zamora y de León aún se consiente que la mujer no sea admitida en algunas de sus hermandades o cofradías, o aprueba reformas de estatutos en los que se mantiene la desigualdad entre hombres y mujeres como cofrades.
Así en la ciudad de León la Cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno se mantienen conformada exclusivamente por varones, y en la de Zamora Tercera Caída, Buena Muerte, Vía Crucis, Silencio, Vera Cruz y Yacente, solo admiten como hermanos de las mismas a hombres.
En cuanto a la reforma de estatutos y reglas se puede producir muy pronto un caso especialmente significativo de consentimiento de desigualdad por parte de la diócesis de Zamora si la Cofradía de Jesús Nazareno - Vulgo Congregación-, de esa ciudad, recibe el visto bueno a su proyecto de estatutos en el que a pesar de que las mujeres serían por fin admitidas, según estos estatutos en “igualdad”, se establece en su contenido un papel muy diferente entre los hermanos y hermanas de esta cofradía
El capítulo II de estos nuevos estatutos hay una división de categorías de cofrades, ya que en él se expresa que las mujeres siguen siendo exclusivamente ‘Damas de la Virgen de la Soledad’, y que sólo podrán desfilar la tarde del Sábado Santo, impidiendo la participación de las mismas en la procesión de Viernes Santo.
En cuanto a los cargos de su Junta Directiva se contempla que el cargo de Abad puede ser ocupado por un hermano o por una hermana, pero si la condición para acceder a este cargo es ser «responsable de la organización y gobierno de la procesión de Viernes Santo», difícilmente podría ser ejercido por una mujer ya que a las hermanas tan solo se les permite ser “Damas”, y se les niega el derecho a procesionar en esa procesión, especificando además en uno de sus artículos que «hombres y mujeres tienen los mismos derechos y obligaciones, salvo en lo que se refiere a los desfiles procesionales que, por razones históricas, tradicionales y de espacio, se limitarán a que los hombres procesionen en la Madrugada del Viernes Santo y las Mujeres en la tarde-noche del Sábado Santo”. Además en esto estatutos se recoge que las mujeres no podrán optar a ser “Merlú” ni formar parte de su Banda de Cornetas y Tambores.
Noticias recientes sobre este proyecto de estatutos nos informan que su aprobación con la firma del obispo es inminente.
Si el obispo de Zamora firma el proyecto de estatutos de la Cofradía de Jesús Nazareno, tal y como está redactado, pervivirá la discriminación de la mujer en esa ciudad, en la que sus cofrades femeninas parecen no tener la suerte de contar con el apoyo firme de su diócesis, como así ha ocurrido en Sevilla, en la que afortunadamente el criterio de la iglesia respecto a la mujer como cofrade es muy diferente.
Mientras que en la Archidiócesis de Sevilla después de pasar catorce años desde que se establecieran las Nuevas Normas Diocesanas, que daban igualdad de derechos en voz y voto a los hombres y mujeres en las hermandades de Sevilla, un decreto por fin destierra el veto a la participación de nazarenas en las procesiones, en la diócesis de Zamora y de León aún se consiente que la mujer no sea admitida en algunas de sus hermandades o cofradías, o aprueba reformas de estatutos en los que se mantiene la desigualdad entre hombres y mujeres como cofrades.
Así en la ciudad de León la Cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno se mantienen conformada exclusivamente por varones, y en la de Zamora Tercera Caída, Buena Muerte, Vía Crucis, Silencio, Vera Cruz y Yacente, solo admiten como hermanos de las mismas a hombres.
En cuanto a la reforma de estatutos y reglas se puede producir muy pronto un caso especialmente significativo de consentimiento de desigualdad por parte de la diócesis de Zamora si la Cofradía de Jesús Nazareno - Vulgo Congregación-, de esa ciudad, recibe el visto bueno a su proyecto de estatutos en el que a pesar de que las mujeres serían por fin admitidas, según estos estatutos en “igualdad”, se establece en su contenido un papel muy diferente entre los hermanos y hermanas de esta cofradía
El capítulo II de estos nuevos estatutos hay una división de categorías de cofrades, ya que en él se expresa que las mujeres siguen siendo exclusivamente ‘Damas de la Virgen de la Soledad’, y que sólo podrán desfilar la tarde del Sábado Santo, impidiendo la participación de las mismas en la procesión de Viernes Santo.
En cuanto a los cargos de su Junta Directiva se contempla que el cargo de Abad puede ser ocupado por un hermano o por una hermana, pero si la condición para acceder a este cargo es ser «responsable de la organización y gobierno de la procesión de Viernes Santo», difícilmente podría ser ejercido por una mujer ya que a las hermanas tan solo se les permite ser “Damas”, y se les niega el derecho a procesionar en esa procesión, especificando además en uno de sus artículos que «hombres y mujeres tienen los mismos derechos y obligaciones, salvo en lo que se refiere a los desfiles procesionales que, por razones históricas, tradicionales y de espacio, se limitarán a que los hombres procesionen en la Madrugada del Viernes Santo y las Mujeres en la tarde-noche del Sábado Santo”. Además en esto estatutos se recoge que las mujeres no podrán optar a ser “Merlú” ni formar parte de su Banda de Cornetas y Tambores.
Noticias recientes sobre este proyecto de estatutos nos informan que su aprobación con la firma del obispo es inminente.
Si el obispo de Zamora firma el proyecto de estatutos de la Cofradía de Jesús Nazareno, tal y como está redactado, pervivirá la discriminación de la mujer en esa ciudad, en la que sus cofrades femeninas parecen no tener la suerte de contar con el apoyo firme de su diócesis, como así ha ocurrido en Sevilla, en la que afortunadamente el criterio de la iglesia respecto a la mujer como cofrade es muy diferente.
Nota: El autor de la foto de esta entrada es José A. Pascual, y está publicada en la web lapasiondezamora.com
Igualdad será cuando una mujer sea Hermana Mayor de una hermandad en Sevilla...mientras son nazarenas por decreto, sin más!.
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